Volvió la paz: Boca dejó atrás una semana complicada y volvió al triunfo en La Bombonera

Boca no la venía de pasar bien en Córdoba, donde un triunfo de Talleres de Córdoba dejó a Hugo Ibarra bajo la mira de los expertos por no poner los nombres de mejor presente en el once titular. Después de que incluso hasta Juan Román Riquelme saliera a defender al técnico, el equipo del Negro logró volver al triunfo en casa.

La Bombonera recibió no sólo al Xeneize, ya que en el banco de Platense se encontraba Martín Palermo, el máximo goleador de la historia del club, como entrenador. Boca mostró una leve mejoría en lo colectivo y también aprovechó errores del rival para poder llevarse un triunfo más que importante por 3 a 1.

Los de Azul y Amarillo sorprendieron de entrada gracias a la grosera salida de Ignacio Arce en una pelota parada que le permitió a Nicolás Figal aprovechar una portería desprotegida para anotar de cabeza el primer gol de la tarde. Pero el Calamar del Titán no tenía intenciones de dar el brazo a torcer y se encontraba con la igualdad por la gentileza de Sergio Romero.

Chiquito no estuvo a la altura de lo que requiere el arco de Boca y su salida con los pies permitió avanzar al rival, que logró empatar por otra floja respuesta del ex Racing y Manchester United mediante una definición de Nicolás Servetto. Parecía que el local iba a tardar en responder si se tomaban en cuenta los partidos anteriores, pero hubo otra actitud.

Luca Langoni quedó solo contra Arce tras avanzar a gran velocidad hacia el arco rival, pero esta vez el ex Unión Española respondió, aunque el rebote le quedó a Miguel Merentiel. La Bestia no desaprovechó semejante regalo y facturó su primer gol con la camiseta del Xeneize a poco de haber llegado al club.

Una segunda parte que sirvió para liquidar

Boca logró encontrar un equilibrio en la mitad de cancha y sufrió bastante menos de lo que padeció en los últimos choques disputados, pero la clave de Ibarra estuvo en una variante en particular. Terminado el partido para Langoni, apostó por Norberto Briasco y el ex-Huracán no falló.

Aprovechó un pelotazo largo, encaró hacia el arco rival y, pese a tener a Merentiel cerca para descargar, con una sutil pero exquisita gambeta, acompañada de una definición con fuerza y dirección, logró anotar el 3 a 1 final. El Beto fue un acierto del entrenador, quien respirará después de ser cuestionado tras caer ante Talleres en Córdoba.