“Mi ciclo no fue muy importante”: el lamento de un ex jugador que no pudo ser figura en River

Muchos jugadores pasaron por River en estos siete años del proyecto de Marcelo Gallardo. Algunos continúan y son símbolos del club, otros se fueron a Europa o Asía y hay otra pequeña porción de los que terminaron su carrera con la camiseta de la franja. Entre ellos está Iván Alonso, el delantero que llegó en febrero del 2016 y se retiró a mediados de 2017.

A pesar de su prometedor historial en Deportivo Alavés y Nacional de Uruguay, de donde fue adquirido por el cuadro millonario, no obtuvo su mejor rendimiento en el equipo argentino. De hecho, tan solo tuvo 36 participaciones en su año y medio en River, algo que se debió principalmente a su edad, que se aproximaba a los cuarenta en ese entonces.

Esto es algo que él mismo lamentó en una reciente conversación con “Marketing Registrado”, ahora convertido en manager de Nacional. “Me hubiese gustado llegar al club con menos años y con una mayor fortaleza física”, declaró al manifestar que las exigencias en el equipo de Marcelo Gallardo son muy grandes, aunque destacó que eso fue una grata experiencia para él, ya que el club es el máximo representante del fútbol sudamericano en el mundo.

“Mi paso por River fue el broche perfecto para mi carrera porque fue lo ideal para mi nuevo lugar dentro del deporte”.

Si bien, admitió que su ciclo en el fútbol argentino no fue muy importante, el uruguayo cree que el respeto que se ganó con sus compañeros dentro del Monumental fueron claves para lo que hace ahora. Por ello es que continua perfeccionándose para ser gerente general en Nacional y el paso por Núñez fue el “master perfecto”.

Los números de Alonso en River

Entre 2016 y 2017, Alonso jugó un total de seis competencias con River, aunque solo sumó anotaciones en tres de ellas. En su primera aparición en la Primera División, le marcó a Belgrano de Córdoba, Sarmiento de Junín y Gimnasia, único partido en que el equipo ganó tras uno de sus goles en la liga.

Los otros tres goles se dieron por Libertadores. Dos fueron en el debut de la fase de grupos del 2016 contra Trujillanos, en la goleada de 4-0, mientras que el segundo fue en la caída con São Paulo en la penúltima fecha, cuando descontó en el segundo tiempo para el 2-1 definitivo. Por último, está el convertido en la final de la Copa Argentina, que terminó 4-3 sobre Rosario Central.