Reestructuración desde las bases: los cambios que se vienen en Universidad de Chile

El fin de la era de Carlos Heller en la Universidad de Chile ha dado lugar a la llegada del fondo Tactical Sport, que se ha convertido en el nuevo propietario del club y tendría planeado hacer una revisión de cada sector de la institución con el fin de determinar quiénes deben seguir y quiénes no.

Esto no solamente repercute sobre los jugadores, entrenadores y ayudantes, sino que también se relaciona con cada trabajador que forma parte del club, al igual que las distintas áreas, que podrían dejar de existir si no dan suficientes beneficios para los empresarios.

Bajo el lema de “ordenar la casa”, los nuevos propietarios de La “U” buscan revertir el déficit, que ya había comenzado a reducir Heller, a través de una potente evaluación de todos los libros financieros que se registran desde 2007, según las afirmaciones del medio chileno “La Tercera”.

Y es que la Universidad de Chile ha subido notablemente su cantidad de empleados desde el año mencionado -en el que se convirtió en sociedad anónima- y el presente, con grandes sueldos que empujaron a la economía hacia los números rojos, que es lo que se quiere corregir a través del recorte presupuestario y la reestructuración de las bases.

En este sentido, el objetivo sería imitar el modelo del Manchester City e invertir solamente en lo indispensable para mejorar los resultados y el potencial del cuadro capitalino, tanto que hasta se evalúa borrar del mapa al fútbol formativo, en parte porque la crisis social del 2019 y la pandemia impiden que los jóvenes realicen las actividades con normalidad.

Otro dato no menor es que varios nombres de históricos de la Universidad de Chile, como Patricio Mardones -captador de talentos- y Diego Rivarola -asesor deportivo-, podrán perder su lugar, aunque quien sí seguiría al mando de la presidencia es Cristián Aubert, debido a sus esfuerzos por reducir los gastos. Algo que aún no se definió es qué sucederá con Rafael Dudamel, que ya había estado en la cuerda floja antes del cambio de firma.