Russo se preocupa: renunció a su club el entrenador que lo reemplazaría en Boca

Miguel Ángel Russo sufre uno de sus momentos más complicados desde que dio inicio su segundo ciclo al mando de Boca. Su equipo fue eliminado de manera polémica en la Copa Libertadores de América 2021, tras los groseros fallos arbitrales que tuvo en contra ante Atlético Mineiro y, tras los hechos violentos ocurridos en los vestuarios del estadio que se sitúa en Belo Horizonte, la delegación completa se encuentra aislada y se perderá el clásico ante San Lorenzo de Almagro.

Pero no es la única mala noticia para el ex técnico de Millonarios de Bogotá, ya que el máximo candidato a reemplazarlo ha presentado la renuncia en el club en el cual dirigía actualmente. Martín Palermo, máximo goleador de la historia de la institución Xeneize, ha efectuado su salida de mutuo acuerdo con la dirigencia de Curicó Unido, de la Primera División de Chile.

El Titán, amado por todos en Boca, ya ha sido nombrado en el pasado como candidato a ser entrenador del club pero por distintos motivos no le ha llegado su oportunidad. Desde la llegada de Juan Román Riquelme a la vicepresidencia segunda del conjunto azul y oro, se ha relacionado su nombre tras haber limado las asperezas del pasado y tener como proyecto principal la participación de viejos ídolos en la estructura deportiva del club.

Palermo, que deja Curicó Unido tras la derrota ante Universidad de Chile por 1-2 en el Estadio La Granja, donde su ahora ex club oficiaba de local, explicó los motivos de su salida en una conferencia de prensa: “Mi decisión es dar un paso al costado, no hay que seguir estirando la situación. Es lo mejor para el club, que me respaldó hasta el final. Creo que es el momento de hacerlo”, sentenció el Loco, que dejará el conjunto Albirrojo tras haber dirigido en 25 encuentros, donde sumó 15 derrotas, seis empates y tan sólo cuatro victorias.

En Boca, donde es palabra mayor, ya se sabe que con Riquelme la relación ha mejorado y mucho. El máximo ídolo de la historia del Xeneize le abre las puertas a todos en su proyecto deportivo, pero sabe que el Titán sólo aceptará un lugar en el fútbol profesional y no ve con malos ojos que sea un tipo con tanto respaldo de los fanáticos que podrá trabajar con relativa tranquilidad ante una posible mala racha como la que obtuvo en el club en el cual renunció tras no haber podido cumplir los objetivos.