Dispuestos a todo: el intercambio que prepara Universidad Católica para el próximo mercado de pases

Poco a poco Universidad Católica piensa en diferentes aspectos para renovar su plantel y poder volver a ser competitivo el próximo año. Para eso, buscará cumplir la mayoría de los deseos que tiene Ariel Holan en la mente y para eso tienen pensado un intercambio para poder contratar a un jugador que se transformó en una obsesión de los equipos grandes de Chile.

El jugador más buscado en este momento es Federico Mateos, quien tuvo una temporada increíble con Ñublense y despertó el interés del Cruzado. El jugador actualmente negocia la renovación de su contrato con los Diablos Rojos, pero la realidad es que podría irse a préstamo o con una futura venta. Por lo pronto, Universidad Católica ofrecerá a Juan Leiva como moneda de intercambio para este futbolista a la espera de la respuesta del club de Chillán.

En los últimos dos meses, Leiva ha gravitado entre los suplentes aunque fue titular en ocasiones asiladas. De los últimos 630 minutos posibles (siete partidos), jugó exactamente 315, la mitad. De esta manera se puede decir que no es una pieza totalmente rezagada en el equipo que dirige Holan aunque no es de tal importancia como para quedarse y pelear un puesto entre sus compañeros.

Lo cierto es que Universidad Católica está trabajando profundamente para darle un giro de 360 grados a la realidad que vivió el club en el 2022, donde no pudo ganar ninguna estrella y se tuvo que conformar con una agónica clasificación a la Copa Sudamericana. Sin embargo, también debe estar atento porque la misma estrategia utilizará Universidad de Chile que también estaría dispuesto a sacrificar a un jugador para intercambiarlo por Mateos.

Un festejo único

El equipo siempre recuerda grandes momentos de la historia y este 21 de noviembre no es la excepción. En sus redes sociales, el cuadro chileno se encargó de recordarles a sus hinchas de la tarde de 1993 cuando el equipo aplastó por 8-3 a Antofagasta por la fecha 22 del Campeonato Nacional.

En esa oportunidad, se rompió un récord que nunca había ocurrido en el fútbol chileno y no volvió a suceder jamás hasta el momento, ya que el ofensivo de la UC Luka Tudor llegó a convertir siete goles en los 90 minutos, una marca totalmente impresionante.