"Se inclinaría la balanza": un ex campeón con Boca manifestó su deseo de volver al club

Boca se mueve sin apuros dentro de este mercado de pases. Varias semanas luego de abrirse la ventana de transferencias, la entidad no muestra ansiedad a la hora de fichar un futbolista y, por ahora, entrena con lo que se encuentra a disposición del plantel pasado con algunas caras conocidas que llegaron desde diversos préstamos.

De todas maneras, en el Xeneize son conscientes de la necesidad de darle un salto de calidad al material con el que hoy cuenta el entrenador Hugo Ibarra si el sueño es pelear por el máximo objetivo. Durante 2022 se convirtió en el monarca absoluto de los certámenes locales quedándose con los dos principales en cada semestre, resultados que propician que las metas se renueven con vistas a lo grande: la ansiada Copa Libertadores. En ese sentido, circula la versión de que Boca querría repatriar a un ex jugador. Nicolás Lodeiro está en la órbita y, desde su lado, las ganas también existen.

“Oficialmente no tenemos nada, aunque sí hemos recibido una cantidad importante de contactos desde Buenos Aires diciéndonos que existe ese rumor”, aseguró su representante Gerardo Cano. Igualmente, en conversación con el programa “Boca de Selección”, reconoció un importante pedido del protagonista: “Me encuentro en conversaciones con Seattle por una posible continuidad. Pero, cuando supo que surgió lo de Boca me dijo 'Gerardo, poné la renovación en un freezer'”.

La diferencia económica entre lo que puede ofrecer el club de La Ribera y una franquicia de la MLS es muy grande, teniendo en cuenta la crisis que atraviesa Argentina, y el uruguayo lo sabría a la perfección: “Tiene en claro que, cuando se juega en Boca, es jugar por la gloria, por cosas que soñó y que estuvieron cerca de lograrse. No se pudo y se tuvo que ir”. Además, sentenció: “Si hoy le das a elegir entre el dinero de la MLS o la gloria en Boca, te digo que la balanza se inclina por la gloria”.

Recuerdo dispar

Lodeiro formó parte de Boca por un año y medio, entre 2015 y 2016. Llegó para hacerse cargo de la creación del juego, primero con Rodolfo Arruabarrena como DT y luego bajo el mando de Guillermo Barros Schelotto. Su nivel se puede catalogar como que fue de mayor a menor tocando su punto máximo aquella tarde en la que un tanto suyo desencadenó un éxito contra River en el Monumental.

Ya en la segunda campaña, perdió un poco de protagonismo quedando marcado como responsable de la dolorosa eliminación de la Copa Libertadores frente a Independiente del Valle, en la propia Bombonera. Su penal fallado en el partido fue lo último que hizo con la camiseta antes de partir al fútbol de Estados Unidos.