Problemas por doquier: la rápida decisión que debe tomar Universidad de Chile

Este viernes el mercado de pases del fútbol chileno tendrá su punto final. A partir de ese entonces, los equipos perderán la chance de incorporar nuevos nombres a la plantilla hasta dentro de seis meses, cuando se abra el periodo de transferencias de verano. Sin embargo, Universidad de Chile sufre enormemente porque puede sumar un jugador más, pero no se deciden sobre qué posición reforzar.

Resulta que las lesiones se hicieron presentes durante este mes y generaron que comiencen a circular las dudas entre Diego López y los dirigentes del Azul Azul. Hoy en día la posición por la que más sufre es en la zaga central, pese a que incorporó a Nery Domínguez que puede jugar en este sector al igual que Emmanuel Ojeda. Sin embargo, el baluarte principal por rendimiento es Bastián Tapia, pero su lesión le generó un dolor de cabeza a Universidad de Chile.

En primera instancia el nombre que más fuerte sonó fue Paolo Reyna y luego surgió la chance de Jesús Trindade. Sin embargo, sumarlos al equipo de López es sumamente complicado por el valor del joven peruano que supera el millón de dólares y por las trabas que tiene el uruguayo para salir de Pachuca antes del cierre del mercado. Claramente en el Romántico Viajero quieren tener más opciones para una competencia interna o por si se da el imprevisto de que un periodo de lesiones complique al equipo como sucede actualmente.

Por otra parte, durante estas semanas también se habló sobre posibles nombres para reforzar la ofensiva del equipo y el puesto de lateral izquierdo, pero no trascendieron mayores detalles. Es más, la prensa chilena afirma que se descartó totalmente la idea de sumar hombres para estos puestos y lo único que le interesa a Universidad de Chile es afianzar la zaga central. Además de los extranjeros ya mencionados, también quieren intentar contratar al argentino Cristian Lema y al uruguayo Gary Kagelmacher.

Lesión confirmada

A las bajas de Luis Casanova y Bastián Tapia se les sumó la de Mauricio Morales el último fin de semana. Confiaban en que el jugador si pueda ingresar y jugar el Superclásico el próximo 31 de diciembre, pero las noticias que llegaron desde la sala médica son sumamente negativas.

José Hun, médico del equipo, le confirmó a la dirigencia y al cuerpo técnico que el jugador sufre de un desgarro y por lo menos estará tres semanas afuera sin poder tener actividad en las próximas tres fechas a partir de hoy, y ya son cuatro las bajas para los duelos que se avecinan si agregamos a Felipe Seymour.