Sin fondo: el ídolo de Universidad Católica que perdió la titularidad y es buscado por el ascenso

Luego de la suspensión por razones climáticas del compromiso que Universidad Católica debía afrontar por Copa Chile la semana pasada, para Ariel Holan no hubo tiempo que perder y enfocó todos los cañones a lo que se viene en agenda. El miércoles se reanuda el clásico suspendido contra la U y es menester un buen resultado.

Los 60 minutos que restan disputarse serán claves para la estabilidad del proyecto Cruzado, ya que una caída en un cotejo tan resonante puede convertirse en una herida difícil de subsanar para un entrenador que se encuentra en la cuerda floja. Uno de los cuestionamientos más importantes que se hacen tiene que ver con no haber podido suplantar de la mejor manera a algunos históricos que pusieron fin a su ciclo en Universidad Católica. Luciano Aued forma parte de esa lista que partió para buscar otros desafíos en Unión de Santa Fe, aunque está lejos de lograrlos por ahora.

Luli es un verdadero ídolo moderno del cuadro precordillerano luego de ser parte del icónico tetracampeonato que alcanzó con esa camiseta. A fines del año pasado confirmó su determinación de retornar a su país y fue el Tatengue el que le abrió las puertas. Lastimosamente, se contagió de un pésimo semestre colectivo sin poder rendir acorde de lo esperado provocando la consecuencia de perder una titularidad que era indiscutida al principio.

Tan incómoda es la actualidad del ex volante de la Franja que ya suena como posible refuerzo de Quilmes, de la segunda división. La realidad es que su contrato con el Blanquirojo finaliza recién en diciembre y su panorama puede cambiar con la asunción próxima de un nuevo cuerpo técnico en la institución. Se todo se mantiene igual, el surgido en Gimnasia de La Plata puede considerar salir.

Insólito hecho

Aued dejó Universidad Católica llegando a los 36 años de edad, una experiencia suficiente como para transformarse automáticamente en referente de Unión, equipo que vivió una situación casi sin prescindente durante el fin de semana. Su flamante técnico, Sebastián Méndez, dejó el cargo a pocas semanas de asumir para tomar la dirección de Vélez, rival directo por el descenso.

El hecho causó conmoción en el fútbol argentino luego de que la Comisión Directiva santafesina sacando un comunicado muy duro en contra del estratega y también del equipo de Liniers a quien tildó de desleal. Ahora deberán buscar una nueva persona para contratar pese a que con el Gallego el conjunto había logrado recuperarse.