CHILE
En Argentina lo fulminaron: fue ofrecido a Universidad Católica y se mostró muy poco profesional
Universidad Católica está obligada a recuperar su nivel deportivo tras una irregular temporada.Todos los mercados de pases están plagados de rumores y de jugadores que suenan para tal o cual equipo. La Universidad Católica no estuvo exenta de ellos y recibió el acercamiento de uno de los más controversiales jugadores argentinos en los últimos años.
Quien se ofreció para jugar en la UC es Ricardo Centurión, jugador argentino con habilidades únicas dentro de la cancha y que podría ser de suma utilidad para la Universidad Católica, pero fuera de los terrenos de juego sus acciones son siempre despreciables noticias, debido a sus excesos con el alcohol y la vida nocturna.
Ahora con 30 años y alejado del fútbol argentino por estos problemas que son una constante, Ricardo Centurión realizó una polémica transmisión en directo por Instagram, donde se lo vio con una cerveza en la mano, fumando un cigarro, mientras hablaba de su presente.
En plena caída en picada de su carrera, Ricardo Centurión fue acercado a Colo Colo, la U y a los Cruzados, sin embargo, estos tres clubes desestimaron inmediatamente la propuesta ya que conocían con detalle la vida extradeportiva del jugador formado en Racing.
Luego tuvo una chance de arribar a La Calera, pero a pesar de que todo estaba encaminado, Centurión nunca envió una respuesta y por ello el club chileno bajó su interés en fichar al jugador argentino.
La última etapa de gloria de Ricardo Centurión
Para recordar la última fase positiva de Centurión en el campo de juego, debemos remontarnos al período bajo la dirección de Gabriel Heinze en Vélez. Durante este tiempo, Ricky tuvo una serie de partidos destacados y desempeñó un papel crucial en una etapa complicada para el equipo de Liniers. Por eso su posible llegada al fútbol chileno y a la Universidad Catolica ilusionó a los hinchas, hasta que conocieron la otra cara del jugador.
Luego de esta etapa pasó por San Lorenzo de Almagro, donde todo terminó de la peor manera, unos videos viralizados del jugador en plena fiesta y la falta de respuesta a la dirigencia del equipo le pusieron punto final a su paso por Boedo.