CHILE
Colgó los botines: el jugador surgido en Universidad Católica que se retiró a temprana edad
La noticia tomó por sorpresa a todo el fútbol sudamericano.Grandes talentos pasaron por Universidad Católica a lo largo de la historia y muchos han triunfado dentro y fuera de San Carlos de Apoquindo. No obstante, hay otros futbolistas que no tuvieron demasiado peso y que se fueron sin ser tan recordados por los fanáticos o con apenas un puñado de minutos en el primer equipo.
Este último ejemplo ilustra a la perfección el caso de Nicolás Solabarrieta, quien llegó para formarse en el Cruzado y se fue cuando no tenía ni siquiera 20 años cumplidos. Construyó una carrera en diferentes países, aunque con apenas 27 años confirmó que se retiró de la actividad profesional. Cabe resaltar que este futbolista abandonó a Universidad Católica cuando todavía no había debutado y, por ese motivo, pocos lo recuerdan.
En ese momento decidió probar suerte en Estados Unidos y deambuló por varios clubes de la USL League Two, la cuarta categoría del fútbol estadounidense. Se sabe que jugó en Long Island, Tucson y Reading United antes de regresar a Sudamérica para ponerse la camiseta de Tacuarembó de Uruguay. Quizás en su mente siempre estuvo el deseo de tener un regreso a La Franja, pero finalmente esto no ocurrió.
En 2020 emprendió la vuelta a Chile y estuvo en Palestino, Deportes Recoleta y Lautaro de Buin todos estos años. Con el inicio de 2023 fichó por Seravezaza Pozzi Calcio, de la cuarta división italiana, pero este envión al Viejo Continente solo fue el puntapié inicial para colgar los botines como lo acaba de confirmar hace unos días.
"No solo forma jugadores, sino que también personas"
Solabarrieta habló sobre su llegada a Universidad Católica en diálogo con "Radio Agricultura" y esto se lo debe a Andrés Romero, quien lo captó en un torneo colegial: "Me vio el Moto y me llevó a una prueba masiva para ver si tenía las condiciones. Me fue bien y lo que me gustaba del club es que en cada categoría cambiaba el entrenador y uno iba absorbiendo mucho de distintos entrenadores".
Pese a que su paso por el equipo fue efímero, el de Vitacura confirmó que estuvo muy a gusto y que encontró un ambiente increíble: "La Católica, como concepto de familia, nos gustaba mucho. Porque no solo forma jugadores, sino que también forma personas".