Una baja sensible: la figura de Colo Colo que no podrá estar para el duelo de vuelta ante Trinidense

La sensación con la que se fue anoche Colo Colo del estadio Tigo La Huerta fue extraño. Por un lado, se tiende a quedar conforme siempre que en un duelo de ida de una llave jugada de visitante se empata, pero también es cierto que se puede tener en cuenta los modos.

En concreto vale aclarar que el Cacique estuvo lejos de su mejor versión en el primer cotejo ante Sportivo Trinidense de Paraguay. La buena actuación que mostró primero para vencer a Godoy Cruz en Mendoza y luego conservar el empate en Chile no apareció, en gran medida por el conservadurismo con el que salió a plantarse el dueño de casa. Sabiéndose menos, solo se dedicó a cerrarle los caminos sin que el adversario los encontrara. Se intuye que la próxima semana puede ser distinto con el cambio de escenario aun sabiendo que Colo Colo no contará con una pieza clave: Oscar Opazo.

De antemano se conocía que el lateral se encontraba en capilla por haber sido amonestado en ambos compromisos contra los argentinos que indicaba que una tercera amarilla consecutiva lo iba a dejar al margen de lo que vendrá. Dicho y hecho ya que deberá verlo desde las tribunas del Monumental sabiendo que se trata de un choque que marcará la vara de todo este primer semestre.

Asimismo, falta saber cuál es el plan de Jorge Almirón de cara al clásico del día sábado contra Universidad de Chile. En caso de que su intención sea cuidar a los titulares poniendo una formación alternativa, se da por descontado que el Torta podría aparecer en el 11 inicial para dar un salto de calidad. Serán horas decisivas para que el entrenador piense bien cómo administrar estos días claves para el Albo.

Sabor agridulce

Esa fue la sensación generalizada en el vestuario de Colo Colo después de que el árbitro marcara el final del encuentro. El equipo se fue de Asunción sabiendo que tiene todas las de ganar para avanzar a la fase de grupos, pero que también podría haber empezado a definir la serie de forma tal de quedarse tranquilo.

Por esa línea se mantuvo el presidente de Blanco y Negro Alfredo Stöhwing. “El partido fue apretado, difícil, no hay rival fácil en Copa Libertadores”, aseguró en declaraciones a los medios. Además, dejó en claro que no existió el conformismo: “Esperábamos ganar, hay un poco de frustración”.