Lo quieren lejos: el motivo por el que Chivas le cierra las puertas a un ex jugador del club

Después de otra irregular campaña en el que no se logró llegar hasta los playoffs, Chivas sabe que tiene la obligación de hacer mejor las cosas para volver a protagonizar la Liga MX. Las malas actuaciones en los últimos torneos comenzaron a colmar la paciencia de la afición, que, en el último semestre, presenció el despido de Víctor Manuel Vucetich por culpa de los malos resultados.

La llegada de Marcelo Michel Leaño sirvió para descomprimir una situación que parecía irreversible, pero, más allá de eso, no tuvo grandes efectos en la competitividad del Rebaño Sagrado, que llegó hasta el repechaje y cayó eliminado contra Puebla por la vía de los penales. La necesidad de reforzar el plantel parece evidente, pero, pasados 14 días desde el inicio de la pretemporada, todavía no hay caras nuevas en el plantel de Chivas.

Por esta situación es que sorprende el hecho de que se le cierren las puertas a un futbolista que dejó un buen recuerdo en la afición de Chivas. El atacante Alan Pulido, con presente en Sporting Kansas City, marcó 41 goles en 117 partidos con la camiseta del conjunto tapatío, pero, cuando su nombre apareció como posible refuerzo, de inmediato aquella posibilidad fue descartada por los dirigentes.

Los detalles del conflicto entre jugador y club

Alan Pulido fue el goleador del Torneo Apertura 2019, con 12 goles, pero aquello no es motivo suficiente para que la directiva dé el visto bueno a su regreso. El motivo por el que Amaury Vergara y el resto de los dirigentes le cierran las puertas al atacante es económico: el jugador mantiene una demanda contra el club por un incumplimiento de pago luego de su venta al Sporting Kansas City en 10 millones de dólares.

El atacante de 30 años presentó en aquel entonces una demanda contra Chivas ante la Federación Mexicana de Fútbol que aún no tiene resolución. De hecho, ahora la disputa pasó al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS). Según el reglamento de FIFA, Alan Pulido debía recibir el 10% del aquel traspaso, pero no lo recibió y eso llevó a la tensión con la directiva.