Un mes con mucha historia: junio, Jordan y actuaciones que quedarán por siempre en el recuerdo

Cuando se nombra de Michael Jordan, todo el mundo sabe de quién se habla. Es la persona que posicionó al baloncesto en el mundo, cuando apenas se transmitía la NBA. Es el principal responsable del impulso de la liga norteamericana al resto del planeta. Historias para contar de él, hay miles, pero en junio, sobre todo, fue cuando más material épico hubo.

Para estas alturas, la liga norteamericana estaría en la disputa de las finales, pero esta temporada se vio afectada por la pandemia del Coronavirus (COVID-19), que ya había retrasado la 2019/20. Es por eso que, en la actualidad, recién se están por disputar las semifinales de conferencia.

Para Su Majestad, junio es un mes más que especial. Por ejemplo, en 1997 y el recordado quinto juego con los Jazz en Utah. La velada anterior al segundo juego, Jordan había sido el único del plantel que había comido una pizza, la cual, sostiene en el documental “The Last Dance”, tenía algo raro. Al otro día, jugó enfermo, con mucha fiebre, no podía respirar, pero se despachó con 38 puntos, los Bulls ganaron y dieron el paso a un título que conseguirían unos días después.

Fuente: (NBA).

En 1992, MJ establecería un récord increíble en la NBA. En el duelo ante los Trail Blazers anotó 35 puntos en la primera mitad del partido, algo nunca antes logrado. Ese 3 de junio, los de Chicago ganaron 122 a 89, con 39 puntos (16/27 en tiros de campo y 6/10 en triples), de Su Majestad.

En 1998, los Jazz aparecerían nuevamente en su camino. Los Bulls perdían 96 a 99 y quedaban 40 segundos. Jordan puso el partido a uno y la posesión estaba en manos de los locales. Luego, ocurriría una épica sucesión. Primero, se la robó a Karl Malone, luego trasladó el balón, consumió el tiempo, encaró al aro y su freno magistral quedó registrado para siempre. Posteriormente, encestó y le dio la victoria a Chicago.

Fuente: (Mandakakara).

El año 1991, más precisamente el 12 de junio, es el momento más recordado en la cabeza del Dios del básquet. Fue cuando, a sus 32 años, logró su primer anillo. Fue tras vencer a los Lakers de Magic Johnson y cerrar la serie 4 a 1.

Antes del partido con fiebre ante los Jazz, en el juego uno, la final comenzó a dar indicios de lo peleada y pareja que iba a ser. Malone, que hasta ese momento tenía 75% de efectividad desde la línea de simples, erró dos tiros libres a 9 segundos del final, cuando estaban igualados en 82. Luego, lo de siempre. Jordan consumió el tiempo, amagó entrar, clavó los frenos y su canasta fue impecable, cuando sonaba la chicharra que anunciaba el final del partido.

Fuente: (Scottie33Pippen).

No caben dudas de que es un mes especial para el jugador más importante de la historia del básquet. El que cambió el juego con cosas que, hasta ese momento, eran impensadas. El que puso a los Chicago Bulls en lo más alto como nunca antes, y como nunca más después.