"Roto": la revelación de Nicolás Massú sobre su la hazaña en Atenas 2004

Ya van 19 años desde que Nicolás Massú consiguió la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 después de una final ante Mardy Fish que duró más de cuatro horas. En ese encuentro la victoria pudo quedar para un lado, luego para el otro y finalmente quedó para el chileno, pero la realidad es que jugó gran parte del partido angustiado por su físico.

Después de enfrentar a Gustavo Kuerten, Vincent Spadea, Igor Andreev, Carlos Moyá y Taylor Dent en muy pocos días, era normal que el Gladiador tenga un cansancio físico notable. Lo propio el estadounidense que también venía de jugar sus cinco desgastantes partidos. Para empeorar la situación, el reglamento del torneo no ayudó a Nicolás Massú y sus problemas físicos: "Estaba en desventaja porque todos los partidos fueron (al mejor) de tres sets y este a cinco".

Para empeorar esta situación, las molestias y dolores del de Viña del Mar eran peores: "Estaba roto físicamente, pero con ganas. Lo único que me preocupaba era eso porque estaba bien entrenado". Incluso el ex top ten reveló que se entrenó arduamente para esta cita, ya que era el gran objetivo de su vida: "De los 20 a 25 años estuve en Buenos Aires entrenando mucho y los argentinos te matan con ocho o nueve horas diarias".

Finalmente el gran temor de Nicolás Massú de sufrir un desgarro o un tirón afortunadamente no sucedió y pudo derrotar a Fish en un partido interminable: si bien empezó ganando al quedarse con el primer set por 6-3, el angelino respondió con un 6-3 y 6-2 para ponerse al frente. Esto fue lo que necesitaba el chileno para avivarse y finalmente terminó ganando los restantes por 6-3 y 6-4 para quedarse con la medalla más codiciada.

El partido más importante

Asimismo, en esa oportunidad el ex tenista continuó con su diálogo en "La Red" y remarcó que fue uno de sus mejores momentos en cuanto a su cuerpo: "Estaba super flaco, rápido y entrenado, era mi pique físico. No iba a perder por cansancio".

Sin embargo, la mente de uno juega un rol fundamental en ese tipo de partidos y ahí radicaba el problema principal: "Fue el partido más importante de mi vida, pero no estaba tan nervioso como antes. Solo me preocupaba por seguir corriendo, seguir luchando y no lesionarme".