Tenis
"Decías cualquier cosa y era multa": Marcelo Ríos y su bronca con la federación
Marcelo Ríos fue claro con respecto al tenis.A pesar de que se retiró hace varios años del tenis, Marcelo Ríos continúa en los primeros planos de los sitios de noticias contando anécdotas o recuerdos de su paso por este deporte que lo vio, en el mejor momento de su carrera, como el número uno del ranking de la ATP.
En las últimas horas, en una entrevista con “ESPN”, el chileno Marcelo Ríos reveló qué cosas no le gustaban de este deporte y apuntó contra la federación: “Lamentablemente, el tenis siempre ha sido mucho de restricciones. Dices un garabato y multa, tiras la raqueta y multa”.
En la misma sintonía, el ex jugador nacido en Santiago de Chile comparó al tenis con otro deporte: “Si ves el hockey sobre hielo, que me gusta harto ir a verlo, se agarran a combos, es un show, un espectáculo, vas a verlo, tomas una cerveza, lo pasas la raja. Wimbledon, vestido de blanco, parecen cualquier wea, no puedes decir un garabato. En mi época, decías cualquier cosa y era multa, plata. El tenis es como ir a ver cricket”.
Asimismo, Marcelo Ríos fue claro con respecto a lo que piensa de esta disciplina que lo tuvo en lo más alto por algunos meses: “Yo nunca he encontrado entretenido el tenis, era mi trabajo, lo tenía que hacer, pero no era entretenido. No era de ir a sentarme a ver un partido y decir 'hoy juega alguien y qué entretenido'”.
Ríos y sus gustos
Por otro lado, Marcelo Ríos confesó qué tenistas le gustaban: “Más encima, todas las finales Djokovic y Nadal, más encima a Djokovic tampoco lo encuentro un tipo entretenido dentro de la cancha. Ver a McEnroe me gustaba, dejaba cosas. Haas también, tipos que eran diferentes”.
Por último, el ex tenista opinó sobre algunos aspectos de este deporte: “Pero eso no iba bien con el tenis, es decir, era mal visto el tipo que decía garabatos, el tipo que puteaba o el que tiraba la raqueta era mal visto. Yo no sé por qué cada vez se hizo peor, después había que vestirse de blanco, en las conferencias de prensa no podías hablar mal de nadie”.