“De la tierra”: el jefe de equipo que colocó a Fernando Alonso por encima de todos

Renault fue la escudería que siempre será recordada por haberle dado a Fernando Alonso el coche que lo llevó a ganar sus dos campeonatos del mundo en 2005 y 2006, aunque luego las cosas con la marca francesa se desdibujaron. Fue a la misma base de Enstone a la que el asturiano regresó en su vuelta a la F1 en 2021, a pesar de que el nombre había pasado a ser Alpine y no recibió el trato que merecía por ser el último campeón del equipo.

Por fuera de que el rendimiento del monoplaza no estuvo a la altura, lo cierto es que el piloto español nunca estuvo cómodo bajo el mando de Otmar Szafnauer, que tomó el lugar de Marcin Budkowski en 2022. Quizá la historia hubiese sido distinta si era Cyril Abiteboul el que lideraba el proyecto, dado que había impulsado la llegada de Fernando Alonso y lo había presentado como el hombre ideal para darle una mentalidad ganadora a la escudería.

Sin embargo, el parisino perdió su lugar de manera sorpresiva en enero del 2021, por lo que no llegó siquiera a disputar una fecha en el campeonato con el "Nano". Metido en el mundo del rally, Abiteboul ahora es jefe de Hyundai Motorsport, pero se mantiene atento al desarrollo de la temporada en la F1 y en una entrevista con “AS” fue consultado por el presente de los españoles. Sin dudarlo, el francés puso al “Nano” por encima de todos al destacar su perfil completo y el placer de verlo entre los primeros de la tabla.

“Fernando no necesita presentación. Es probablemente el piloto más completo de la tierra y es una alegría volverle a ver en lo alto de la Fórmula 1”.

Sin modificaciones

El GP de Imola era el escenario ideal para que los equipos lleven a cabo las actualizaciones de sus monoplazas y, de hecho, se habían trasladado varias piezas a la región de Emilia-Romagna para tal fin. Pero con la cancelación del evento debido a la alerta roja provocado por las fuertes lluvias y las inundaciones, la oportunidad de probar estas piezas no fue posible, ni tampoco lo será en el GP de Mónaco.

El problema fundamental pasa por la especificidad del circuito, que no es similar a ningún otro en cuanto a sus exigencias, lo que hace imposible que la recolección de datos sea determinante en el futuro. En este sentido, Aston Martin tiene cierta ventaja, dado que no pensaba hacer muchas modificaciones en Imola en los coches de Fernando Alonso y Lance Stroll, mientras que Ferrari y Mercedes habían esperado con ansias las actualizaciones de sus decepcionantes SF-23 y W14.