“No soy su niñera”: Óscar de la Hoya reconoce que no puede controlar a Ryan García

Ryan García ha vuelto a llamar la atención de la prensa especializada este viernes, cuando nuevamente fue protagonista por su indisciplina al no cumplir con las 140 libras que exigía la disputa por el cinturón del peso superligero del CMB. En el pesaje privado, el púgil pesó 143,2 libras, lo que equivale a decir que se pasó por 1,45 kilógramos, por lo que incluso el encuentro con Devin Haney había quedado en duda.

No obstante, el boxeador californiano finalmente se enfrentará al estadounidense luego de un arreglo económico, aunque eso no hizo que su imagen quedase restaurada, sobre todo tras lo intenso que estuvo el último careo. Su promotor, Óscar de la Hoya fue uno de los consultados recientemente por lo que sucede con Ryan García, quien ni siquiera parece centrado en el boxeo y cuya salud mental se cuestiona constantemente.

Es así como, en diálogo con “DAZN Boxing”, el dueño de Golden Boy Promotions reconoció que no puede controlar al KingRy, a tal punto de que en muchas ocasiones no logra entender cuándo bromea y cuándo no. Por otro lado, recalcó que tampoco es su trabajo estar detrás de sus actitudes y enseñarle a ser más correcto, puesto que se limita a organizarle combates, una labor que podría terminar en diciembre si no se renueva el contrato.

“Ese es Ryan, él es único, él hace lo que quiere. La gente me dice ‘¿No puedes controlarlo?’ No soy su niñera, no soy su mánager, soy su promotor, hacemos eventos juntos. Cuando Ryan me dice que está bromeando no sé si creerle”.

La multa que debió pagar Ryan García

Dentro del mundo del boxeo, las peleas se pactan mediante contratos que ambas partes deben cumplir, motivo por el que cuando algo sucede el encuentro puede anularse o haber una renegociación. Esto último fue lo que sucedió con Ryan García, quien al no pasar la báscula debió escoger entre dejar pasar la pelea o abonarle una importante suma de dinero a Devin Haney.

Y es que el equipo del campeón del peso superligero del CMB exigió 500 mil dólares por cada libra que fue superada por el retador, quien aceptó a pagar casi 1.5 millones con tal de no dar marcha atrás con el pleito. De todas formas, el californiano se perdió la oportunidad de luchar por el título y proclamarse campeón mundial absoluto por primera vez en su carrera profesional.