FÓRMULA 1
10 millones de euros: el pasatiempo más caro de Fernando Alonso
El piloto asturiano se dio un lujoso regalo para apaciguar la pobre temporada con Aston Martin.A comparación con lo que había sido el 2023, Fernando Alonso atraviesa un momento difícil en Aston Martin, con dos carreras consecutivas sin sumar puntos y ubicado en el noveno lugar de la tabla. Si bien en la escudería británica siguen los trabajos para mejorar el rendimiento del AMR24, el asturiano ha optado por darse un respiro esta semana y olvidar un poco lo que es andar con los pies en la tierra.

Lejos de eso, el piloto español optó por gastarse unos cuantos millones para comprarse un catamarán eléctrico que trae consigo la última tecnología de embarcación. Se trata del 80 Sunreef Power Eco, el cual tiene espacio para 12 personas y una longitud de 24 metros, además de varios lujos en el interior para que Fernando Alonso disfrute de unos tragos en el bar, tome sol en la terraza o pase un rato en el jacuzzi.
Sin duda, el Nano ha hecho una interesante inversión al abonar los diez millones de euros que costó el yate, puesto que la inmensidad del mar le dará la posibilidad de desconectarse un poco de lo que sucede en la Fórmula 1. De hecho, se sabe que la navegación es una de sus grandes pasiones y con esta nave ahora podrá tomarse un respiro cada vez que quiera y que el calendario se lo permita.

La crítica que Fernando Alonso le hizo a Mónaco
Sin lugar a dudas, el GP de Mónaco fue la decepción más grande de la temporada hasta el momento. A excepción del accidente de Checo Pérez con Kevin Magnussen y Nico Hülkenberg al principio y el de los dos Alpine en la primera vuelta, no ha pasado nada interesante en la carrera. Tal es así que Fernando Alonso, quien creía haber terminado décimo cuando cruzó la línea de meta, se mostró crítico con el circuito.
“Es Mónaco, siempre es difícil disfrutar del espectáculo el domingo. Con la bandera roja, se cambian los neumáticos y vas hasta el final. El único punto de interés en Mónaco son los cambios de ruedas, si quitas esa emoción del pitstop se vuelve nada. Eso reabre las conversaciones sobre no cambiar las ruedas u obligar a usar otras, porque hay ocasiones en las que la carrera se compromete”, afirmó el español en declaraciones rescatadas por “As”.