FÓRMULA 1
100 millones de euros: la oferta de Aston Martin que podría cambiar el futuro de Fernando Alonso
El equipo británico quiere contentar al bicampeón y puso una oferta sobre la mesa.Lejos del rendimiento que se había visto el año pasado con el AMR23, crece la preocupación en Aston Martin por no poder llevar a Fernando Alonso de vuelta al podio, algo que hizo en ocho oportunidades en 2023. Por si eso fuera poco, el AMR24 últimamente ha sumado puntos a cuentagotas, tanto que este domingo solamente pudo sumar Lance Stroll, que terminó décimo en el GP de Hungría.
De ahí que la escudería británica haya hecho importantes inversiones para mejorar su equipo y su infraestructura, con el objetivo de darle al piloto español un coche competitivo para 2026. Ese posiblemente sea el último año de Fernando Alonso en la Fórmula 1, motivo por el que Aston Martin quiere darle un monoplaza que no solo pueda llevarlo al podio, sino que también le dé chances de ganar carreras en la nueva era de los motores.
Para tal fin, el equipo de Silverstone está empecinado en contratar a Adrian Newey, quien se marchará de Red Bull en diciembre y no sabe si estará en la F1 en 2025. Si bien el ingeniero británico es buscado también por Ferrari, “F1-Insider” señaló que los verdes están mejor posicionados para su contratación, algo para lo que habrían ofertado 100 millones de euros por cuatro años, de manera tal que el inglés pueda diseñar el coche del Nano.
El drama de Fernando Alonso y Lance Stroll
El GP de Hungría estuvo plagado de polémicas. El choque entre Max Verstappen y Lewis Hamilton, sin sanción para ninguno de los dos, y la súplica de McLaren a Lando Norris para que le devuelva el liderazgo a Oscar Piastri fueron las más vistas, pero Aston Martin también tuvo lo suyo. De manera similar al equipo naranja, un pedido de devolución de lugar tuvo lugar entre Fernando Alonso y Lance Stroll.
En la etapa final de la carrera, la escudería británica le ordenó al español que deje pasar a su compañero, que tenía mejor ritmo de carrera para ir a por Yuki Tsunoda. El problema vino cuando el canadiense no logró su cometido y debía devolverle la posición al bicampeón del mundo, algo que se negó a hacer al desobedecer las órdenes que le llegaban por radio y que tensó las relaciones en el equipo.