A cuidar la salud: el riesgo de dejar las botellas de plástico bajo el sol

Si bien en la región sur de Sudamérica se están viviendo bajas temperaturas, por encima del Ecuador están en plena primavera y de a poco empiezan a prepararse para lo que será el inicio del verano, una de las estaciones del año donde las personas deben hidratarse continuamente para no tener consecuencias en la salud. Sin embargo, las botellas de plástico pueden ser perjudiciales para el cuerpo humano si están constantemente expuestas al sol.

Ante ello, la Administración de Medicamentos y Alimentos estadounidense realizó una investigación sobre los componentes de los envases y demostraron que, al estar tanto tiempo bajo el sol, eliminan una mínima cantidad de químicos que pueden ser perjudiciales. Si bien la reacción no se verá al instante, las consecuencias y los problemas de salud se verían a largo plazo, por lo que entregan una serie de recomendaciones a tener en cuenta con respecto a las botellas de plástico.

Según aclararon, la sustancias que liberan los objetos cilíndricos es el antimonio, que puede resultar tóxica en dosis elevadas para el cuerpo humano, ya que cuanto más calor reciben más material se puede filtrar en el agua. Más allá de que la cantidad sea demasiado minúscula para afectar a la salud, los expertos aclaran que los efectos podrían verse a largo plazo, debido a que las dosis se acumulan al punto de causar consecuencias en el futuro.

De esta manera, los investigadores, que llevan años analizando a las botellas de plásticos para detectar cuáles son las temperaturas que más pueden afectar y contaminar el líquido, recomendaron que lo mejor es que las personas se hidraten con envases que se encuentren en un clima templado. Es difícil evitar el calor en verano, pero lo mejor es tener los objetos fuera del alcance del sol directo o de lugares que puedan aumentar las temperaturas, ya que a cuanto más calor más serán las toxinas que eliminen y contagien al agua.

La temperatura ideal para las botellas de plástico

Así como las altas temperaturas pueden ser perjudiciales, a largo plazo, para la salud de las personas por la liberación de antimonio que en sus altas dosis podría traer consecuencias, los expertos recomiendan que las botellas de plásticos se encuentren dentro de un clima que ronde los 20°C.

“Si en el rótulo consta que el alimento se pude conservar a temperatura ambiente, esta no debe superar los 25°C siendo la óptima alrededor de los 20°C, esto se fundamenta en que las temperaturas altas, la exposición a la luz y si el envase está abierto se le suma el oxígeno, pueden ser origen de ciertas reacciones conocidas como pardeamiento, que atentan a estabilidad y/o la inocuidad del alimento según sea su composición y nunca hay que dejar de lado el desarrollo de microorganismos por contaminación que también sumarían a esta pérdida de la inocuidad”, explicó la licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos y Magíster Internacional en Tecnología Alimentaria Susana Caruso, en diálogo con ‘Infobae’.