INTERÉS GENERAL
Una rutina poco saludable: por qué debes evitar comerte las uñas
Es uno de los trastornos que más se repiten y uno de los menos higiénicos que hay debido a que se hace todo el tiempo y con los gérmenes dispersos por nuestras manos.
Morderse las uñas puede ser una de las prácticas más comúnes que hay y muchas veces está ligado a un método desestresante. Sin embargo, también dicen que esta rutina puede ser por momentos de ansiedad o aburrimiento. Finalmente afirman que después de muchos años haciéndolo, se volverá una obsesión sin ningún motivo aparente.
Esto se llama onicofagia y posiblemente sea de las costumbres más desagradables, aunque también una de las más vistas en todo el mundo. Lo increíble es que hacer esto no tiene ninguna ventaja y, por el contrario, los médicos de todo el mundo recomiendan evitarlo lo antes posible. El peligro de esta rutina es evidente: las manos repletas de gérmenes terminan en nuestra boca y nosotros mordiendo justamente en donde más se acumulan las bacterias.
De todas maneras, este hábito va más allá y puede causar otros problemas que no están relacionados 100 % con las bacterias que ingresan a nuestro cuerpo. Uno de ellos tiene que ver con posibles infecciones en los dedos, ya que la uña sirve como capa protectora y debajo de ella hay piel demasiado sensible que quizás no pueda actuar de barrera inmunológica. Además, el desgaste de nuestros dientes con el rose se evidenciará rápidamente.
Mientras tanto, en lo que a las bacterias refiere, podríamos sufrir problemas intestinales o respiratorios, puesto que estamos haciendo un puente entre nuestro sistema y estos micro organismos que entran a nuestro cuerpo. Y finalmente, hay que inclinarnos a lo psicológico que también puede verse perjudicado por esta rutina que se relaciona con un trastorno de ansiedad.
De hacer esta rutina a una operación
Hace semanas, el medio "Antena 3" dio a conocer una historia increíble e insólita, aunque es una buena lección para quienes se muerden las uñas. Siguió la historia de Mario, un hombre que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente por una bacteria que ingresó a su cuerpo justamente por morder sus uñas.
Según relató el protagonista en aquel momento, todo comenzó con vómitos y fiebres que llegaron a paralizar su cuerpo. Los expertos lo operaron a corazón abierto, con el riesgo que ello implica, y afortunadamente todo salió bien. Pero hay que aclarar que en medio tuvo problemas en riñones, cerebro y bazo.
