No hubo arreglo: el GP de Países Bajos sigue en riesgo y pone en jaque a la Fórmula 1

Lo que parecía ser el fin de la espera para el regreso de la Fórmula 1 luego del parón de verano, poco a poco, se ha ido complicado, ya que el Gran Premio de Zandvoort en los Países Bajos está en duda debido a taxistas que realizarán bloqueos alrededor del circuito los días de actividad.

La razón es que 150 taxistas de Haarlem tienen pruebas contra el municipio de Zandvoort, el cual ha designado a una empresa de taxis fuera del mismo para el fin de semana de la carrera de la Fórmula 1. De esta manera, el Gran Circo podría perder su tercera cita en esta temporada tras la cancelación del Gran Premio de Imola y el de China.

Tras una reunión del municipio y el alcalde de Zandvoort, David Moolenburgh, se otorgaron garantías para 2024. Sin embargo, horas más tarde, los taxistas revelaron: “Por la noche apareció en nuestra aplicación de grupo un mensaje de una empresa de las afueras que todavía tiene permisos. Ahora lo tenemos en blanco y negro y, por supuesto, lo hemos confrontado con el municipio".

En esta sintonía, el portavoz del grupo aclaró que las nuevas pruebas pueden provocar bloqueos que afectaría la actividad de la categoría: "Si esto sigue así, definitivamente bloquearemos. Preferiblemente en un momento en que duela: el domingo, tal vez el sábado. También es posible antes, así todavía tendrán la oportunidad de arreglar algo para nosotros".

El Ayuntamiento y su respuesta

Ante este panorama, el municipio manifestó que estos permisos se basan en unos datos que tiene el servicio de tráfico por carretera y que, en el Gran Premio, también habrá taxis asistenciales: "Hay compañías de taxis fuera de nuestro pueblo que están matriculados en Zandvoort. Con base en eso, tienen un certificado de aprobación. En Zandvoort también hay una empresa con permiso de aparcamiento de trabajo”.

Habrá que ver qué sucede en las próximas horas con respecto a este tema que tiene preocupado a los directivos de la Fórmula 1, que esperaban que el Gran Premio de los Países Bajos se desarrollara con total tranquilidad y que fuese una fiesta en las tribunas del circuito.