La ciencia lo confirmó: el gesto que tu perro odia según un revelador estudio

Las mascotas son una parte fundamental de la familia, como un integrante más que genera un lazo muy sólido con base en el amor incondicional. Tu perro puede ser la mejor compañía, por lo que te nacen ganas de demostrarle todo tu cariño. Sin embargo, esto puede ser perjudicial, porque las prácticas comunes entre humanos no tienen la misma repercusión en tus mascotas y hasta pueden llegar a tomarlo de la peor manera. Hay un gesto en particular que tu perro puede odiar si lo haces.

Muchas personas sienten más amor por su perro que por otros seres humanos. La compañía y la confianza que te puede generar tu mascota puede ser difícil de igualar para otra persona. Sin embargo, al momento de demostrarle afecto, no todas las muestras de cariño son aceptadas por los canes. De acuerdo con un estudio realizado por Elizabeth Ann Walsh del Cork Pet Behaviour Centre, en Cork, Irlanda, los perros no reaccionan bien a los abrazos.

Esta habitual práctica para demostrar cariño no funciona de la misma manera en tu perro. Tu mascota puede tomar al abrazo como una intención de inmovilizarlo y, al privarlo de la posibilidad de huir, su nivel de estrés tiende a aumentar e incluso puede llegar a morder si su ansiedad es muy intensa. En ese sentido, los especialistas recomiendan cambiar el abrazo por otra forma de afecto que no lo inmovilice o restrinja sus movimientos, como las caricias.

El motivo por el que tu perro no reacciona bien a los abrazos

El estudio tomó en cuenta más de 80 videos publicados en las redes donde se ven a perros siendo abrazados por sus dueños. En el análisis de las imágenes, los especialistas pudieron detectar gestos de los animales donde se los notaba incómodos y hasta enojados, como parpadeo, jadeo y hasta mordeduras. 

“Es un comportamiento esencialmente primate. Por ejemplo, vemos abrazos similares en los simios no humanos, pero es algo que los perros no hacen entre sí de forma natural. Hay muchas formas de tener un contacto corporal estrecho con los perros que no requieren rodearlos con los brazos de forma confinada”, informó Evan MacLean, codirector del Centro de Cognición Canina de Duke.