Día del amigo: las mejores recetas para sorprender a tus seres queridos en el festejo

El día del amigo es una de las fechas más especiales del año y una gran excusa para sorprender a tus seres queridos. Si bien no se necesita una fecha en particular para demostrar el amor a las personas más fieles de tu círculo, lo cierto es que nunca viene mal un momento para planear salidas y actividades con ellos. Fortalecer los vínculos de la amistad es fundamental para una relación sana y duradera y qué mejor que hacerlo con unas ricas recetas.

Si te toca ser anfitrión este día del amigo o simplemente te gustaría regalarles algo rico, te dejamos tres recetas que pueden ser una gran opción para esta celebración. El primer platillo, si bien es de origen italiano, es un clásico argentino. Se trata de la torta de ricota y para realizarla necesitarás 500 gramos de ricota fresca, 200 gramos de azúcar, 100 gramos de harina, tres huevos, una cucharadita de esencia de vainilla y una pizca de sal. 

El primer paso en esta receta es precalentar el horno a 175 grados, mientras mezclamos la ricota con el azúcar y la ralladura. Luego, añadimos los huevos, la harina y la sal para mezclar y obtener una masa homogénea. Finalmente, vierte la mezcla en el molde pre engrasado y hornea durante 45 minutos.

Como segunda opción puedes regalarle a tus amigos unos ricos panqueques. La versátil masa se prepara mezclando 1 taza de harina, 2 cucharadas de azúcar, 1 cucharadita de polvo de hornear, 1/4 de cucharadita de sal, 1 huevo grande y 1 taza de leche. La mezcla se vierte, en pocas cantidades, sobre una sartén caliente hasta que estén listos de ambos lados. Luego, se rellenan con lo que más te guste.

Ideal para compartir: una de las recetas más tradicionales de Argentina

Finalmente, la última receta es ideal para compartir con amigos y familia y un clásico de América Latina. Se trata de las tortas fritas, que no solo son deliciosas, sino que también muy económicas. Para hacerlas necesitas: 500 gramos de harina común, 1 cucharadita de sal, 50 gramos de grasa, agua tibia y aceite para freír.

Como primer paso se mezclan la harina, la sal y la grasa. De a poco, debes ir agregando agua tibia para formar una masa suave y homogénea. Luego, hay que dejarla reposar tapada por 15 minutos. Pasado ese tiempo, es el momento de dividir la masa en pequeñas porciones y estirar hasta obtener discos. Antes de freír, debes hacer un orificio en el centro para evitar que se infle. Cocinar en el aceite hasta que estén doradas, dejar escurrir y ya están listas para disfrutar.